El 80% de los comercios de San Luis no van a implementar el horario corrido en invierno
Desde el sector aseguran que no les conviene porque el movimiento durante la siesta baja.
La llegada de las estaciones de otoño e invierno no sólo traen aparejadas bajas temperaturas, sino que todos los años se produce el mismo debate en cuanto a la atención de los comercios, es decir, si se aplica el horario corrido o continúa el tradicional.
Según un relevamiento de la Asociación de Comerciantes y Trabajadores Independientes de San Luis (ACTI) en aproximadamente 120 locales de diferentes rubros, el 80% no van a implementar modificaciones en la apertura y cierre.
Otro dato es que del 20% restante, el 15% ya viene aplicando durante todo el año el corrido (independientemente de la estación), mientras que sólo el 5% decidió ajustarlo sólo por la época invernal.
Desde el sector aseguran que es “muy difícil” que se produzca algún cambio porque previo a eso debe existir un acuerdo absoluto o de la mayoría de los propietarios de locales para implementarlo. A eso se suma que no a todos les conviene porque en la siesta desciende el movimiento del público.
Sin embargo, implica un beneficio para el empleado porque genera menos gastos de traslado y les permite hacer otras actividades en el día.
La presidenta de ACTI, Mayra Aranega, explicó a este medio que, de instrumentarse un cambio, debe ser por rubro: “No es lo mismo indumentaria o calzado que un kiosco, una farmacia, un corralón o una pinturería” por lo tanto “es una decisión libre de cada comerciante y depende de la realidad que cada uno viva”.
Hay locales deciden aplicar de lunes a viernes el tradicional mientras que sábados o feriados lo hacen de largo. Esto depende del movimiento y del sector en donde se encuentra la empresa, microcentro o fuera de las cuatro avenidas.
“Creo que esto es un tema muy cultural porque cuesta. Incluso en la pandemia cuando estuvimos trabajando así a la gente le costaba venir. Cerrábamos a las 18 y llegaban cinco minutos antes de cerrar, es decir, esperaban a último momento porque en la siesta no salían”, graficó y reveló: “Hay que ver también la cantidad de horas, recordemos que el empleado no puede estar más de ocho. Entonces ahí debíamos tener un doble turno y hoy en día, con todas las problemáticas que hay, es complicado mantener a dos”.
Aranega afirmó que durante el año pasado en su local atendió de 8 a 21 pero “nunca pude lograr que funcionara”.
“A algunos les sirve este sistema y a otros no, todo depende de la forma de manejar sus horarios y demás. Pero para que funcione, se tienen que poner todos de acuerdo porque van a estar también los que van a querer sacar ventaja, una competencia desleal”, argumentó.
El presidente de la Cámara de Comercio, Emmanuel López, aseguró que hasta el momento no se definió nada con respecto a este tema porque desde la entidad “bregamos por la libertad comercial”.
“Con los comerciantes siempre se trata el tema, hay muchas voces a favor y muchísimas en contra. Muchos definieron que hay muchas problemáticas más graves para tratar en el ámbito económico, fomento del consumo, acceso al crédito, aumento en tasas municipales, entre otras cosas”, aseguró.
Fue poco optimista a la hora de referirse a un cambio: “No creo que sea posible por el momento. Tiene que haber un consenso importante entre todos los comercios y esa mayoría no está. Hay que articular también con los propietarios del sector gastronómico, bancario, administración pública, industria y sindicatos”.
Un equipo de El Chorrillero en un sondeo que realizó por el microcentro obtuvo la opinión de comerciantes de calle San Martín, Peatonal Rivadavia y Colón. La mayoría trabaja con el horario cortado y no está en los planes realizar cambios.
Brisa Calderón, empleada de Artesanías Canejo, contó que después de la pandemia la atención se hace en un solo tramo, pero se dejó de hace porque en la siesta “acá normalmente se duerme entonces es muy raro encontrar gente activa. Comercialmente no rendía”.
Gonzalo Salinas de Megacell 2.0 dijo que la sucursal de venta de artículos para celulares y tecnológicos, siempre funcionó de corrido.
“Es algo muy necesario porque, por ejemplo, en nuestro caso tenemos clientes que se acercan después del trabajo, cuando los comercios están cerrados por lo general y si tienen que volver a la tarde se les complica porque tal vez viven lejos. Además, de que en invierno a las 19 hace mucho frío y no circula tanta gente”, precisó.
Y agregó: “Trabajamos siempre con este sistema y la verdad que nos viene bien ya que permite que nos acomodemos entre compañeros cuando uno necesita a la mañana y otro a la tarde. Nos da esa posibilidad”.
“Creo que el nuevo sistema no se aplica porque la gente en San Luis está acostumbrada a no salir en la siesta”, respondió.
El gerente de Naldo, Víctor Castillo comentó que en el caso de la sucursal no les conviene porque las ventas “bajan mucho” después del mediodía y retoman por la tarde-noche a pesar de las bajas temperaturas.
“Sinceramente es una cuestión de costumbre y hoy no está. Me parece que tuvo su oportunidad después de la pandemia, en haber seguido pero eso no ocurrió y hoy no creo sinceramente que se dé. Hoy en los comercios, por ejemplo, baja mucho el movimiento en la siesta”, expuso.
Castillo ratificó que todo depende si a nivel comercial es factible aplicarlo: “Realmente veo muy complicado porque no creo que los dueños de los comercios quieran adherirse, más por el ritmo de vida que tenemos, en la siesta no anda mucha gente”, declaró.
El gerente de Castellanas, César Romero, anticipó que en junio y julio atenderán de corrido y está en análisis si lo mantienen en agosto: “Hay múltiples ventajas que trae esta modalidad, más en esta época de bajas temperaturas. Depende muchas veces de varios factores principalmente la infraestructura en personal suficiente para poder responder a la demanda”.
“Tenemos pronto el Día del Padre que es una venta especial que puede generar movimiento, apostamos por ahí al menos por el mes próximo y extenderlo si resultara”, expresó.
Luego de esos meses, retomarán con el horario de cortado.
Al ser consultado de por qué no se produce un acuerdo en los comercios, manifestó que “esto pone en discusión la paridad competitiva, que no exista la deslealtad, creo que sería bueno y parejo que tuviéramos el mismo criterio, es decir, todos cerrar a las 18 o 19 pero está quien no lo va a hacer”.